Citología de raspado uretral

En el periodo 1884-1990, se detectaron en Costa Rica 2241 casos nuevos de cáncer de cuello uterino In Situ, un promedio anual de 320 casos nuevos por año, las tasas fueron de 24.9 por 100 000 mujeres. En el mismo periodo se diagnosticaron 1850 casos nuevos de cáncer de cuello uterino invasor, un promedio anual de 258 casos y las tasas de incidencia fueron de 25.6 por 100 000 mujeres. El 18% de todos los cánceres en mujeres se debe al cáncer de cuello uterino invasor, el cual es el segundo más frecuente, aún en esta época. A partir de la creación del Laboratorio Nacional de Citología, enmarcado en la última Campaña Nacional de detección de esta patología, en el año 1996, dichas cifras se incrementaron, debido al aumento en la cobertura, destinado a mujeres de zonas rurales, marginales, inmigrantes e indígenas.
La relación de la neoplasia intraepitelial cervical (NIC) o conocida mas comúnmente como displasia o lesión pre-maligna y los condilomas o coilocitos de etiología venérea ya ha sido largamente establecida.
Ciertos tipos de virus de papiloma humano (VPH) son oncogénicos tanto in vitro como in vivo, evidenciando con esto su capacidad como cofactores etiológicos de procesos malignos a nivel de cérvix, vagina y vulva y con los estudios más recientes a nivel mundial, se ha asociado a lesiones de pene.
Se ha encontrado hasta 65 a 88% de presencia de papiloma en varones compañeros de mujeres con este virus en frotis cervicales anormales o papanicolaous anormales, demostrando con esto al varón como agente promotor importante de diseminación y transmisión de esta enfermedad.
• Se estima que el 50% de hombres y mujeres sexualmente activos adquieren el virus en algún momento de su vida.
• 9.2 millones de adolescentes y adultos jóvenes (15-30 años), están infectados con el virus.
Según el Registro Nacional de Tumores, hasta 1986 1.14/100 mil varones presentaba cáncer de pene. En esta época según informes del departamento de Urología del Hospital Calderón Guardia, 16 varones presentan esta patología.
Su incidencia puede aumentar considerablemente en aquellas regiones con elevada tasa de población rural, bajo nivel socioeconómico y con hábitos de higiene muy precarios.
Existen más de 120 subtipos de virus conocidos como virus papiloma humano. Un estudio encontró VPH (papiloma humano) en el 77% de las mujeres VIH+. Los VPH se transmiten fácilmente durante las actividades sexuales.

** Los condones no previenen su transmisión completamente, solamente un 30% de protección debido a que en algunos casos este virus se incuba en la base del pene y el simple echo de tomar el miembro para ponerse el condón podría en algún momento contaminar la piel.

Pueden ser transmitidos de persona a persona a través del contacto con zonas infectadas no cubiertas con el condón. Para una protección mejor, debemos utilizar el condón cada vez y ponerlo antes del contacto sexual. Algunos VPH causan las verrugas comunes de manos y pies. No existe ninguna manera fácil de saber si alguien está infectado con VPH. Las personas que no muestran signos ni síntomas de infección con el VPH pueden transmitirlo. Varios tipos de VPH causan lesiones de aspecto verrugosa en el pene, vagina y recto. El VPH también puede causar problemas en la boca o en la lengua y los labios. Otros tipos de VPH (papilomas) están en relación con un aumento anormal de células, conocido como displasia. La displasia puede evolucionar al cáncer de pene y ano, y al cáncer cervical ( útero) en las mujeres.

Lamentablemente en Costa Rica, se ha venido invirtiendo sumas exhorbitantes en la detección y prevención al cáncer de cuello uterino, olvidándose del cáncer de pene y del VPH (papiloma) en el varón que al formar parejas con la mujer se convierte en un agente transmisor importante de este virus. Esto a nuestro parecer debido, a la inexistencia de un examen que permita un “ataque frontal” dirigido al ente transmisor de virus del papiloma humano, que en este caso es el varón.
A nivel mundial se ha establecido que el cáncer invasor de cérvix es más común en mujeres entre los 25 y 40 años no obstante, en nuestro país esta brecha se ha visto disminuida debido a que los embarazos e inicio de relaciones a temprana edad son muy comunes, ya que la edad promedio de iniciar la actividad sexual es de 12 años en los varones y 14 años en las mujeres; esto según estudios del Programa Integral del Adolescente de la C. C. S. S. Además de ello, el 18% de los partos en nuestro país, son de madres adolescentes. Unido a esto, la inmigración descontrolada, la libertad sexual y los asentamientos de trabajo en zonas rurales (ej. las zonas indígenas), han podido influir en la transmisión y propagación de agentes que predisponen al cáncer cervico-uterino y pene.
A toda esta problemática debemos anexar la falta de educación en salud existente en nuestra población adolescente, las campañas publicitarias no involucran al varón en la problemática de la diseminación del virus del papiloma humano (HPV), mucho menos permiten al varón tener la posibilidad de acceder a servicios de salud que le permitan detectar dicho virus en su etapa latente, lo cual incrementa la problemática y más aún, impide realmente, que las campañas masivas de detección y atención del cáncer de cuello uterino y pene lleguen a ser productivas. Por ello consideramos que la realización de la citología de raspado uretral o por citología líquida es de suma importancia ya que permitirá una detección temprana de la presencia del virus en va rones, así como otros tipos de infecciones tales como hongos, bacterias, virus, etc, que generalmente son ascintomáticos en el sexo masculino, aparte de ello permitirá disminuir la incidencia de cáncer de pene y al ser detectado a tiempo dicho virus en el varón permitirá establecer el riesgo o tipo de virus (sea oncogénico o no) por medio de exámenes más especializados como la tipificación.
Este documento tiene su origen en nuestra preocupación ante la falta de educación en salud que poseen ciertas zonas de nuestro pías; en relación a la prevención y detección de enfermedades de transmisión sexual, específicamente el contagio del Virus del Papiloma Humano en la población adulta y adolescente, que lamentablemente no solo está atacando a la población femenina de nuestro país, sino que se está haciendo patente y latente en la población masculina, pero con más fuerza en las zonas menos privilegiadas; entre ellas, las zonas indígenas, grupos de adolescentes de zonas marginales y urbano-marginales, entre otras.
En nuestro país, dada nuestra idiosincrasia, el tema de sexo en la población masculina es casi un tabú. Hasta julio del 2004, muy pocos varones conocían acerca de la transmisión del virus del papiloma humano y más aún, de las causas que éste podría ocasionar en el sistema genital masculino, pues como se comentó anteriormente, siempre se ha dado énfasis a la problemática de éste sobre la población femenina, más no obstante, hoy por hoy, hemos demostrado los estragos que este virus está produciendo en los varones, al punto de estar produciendo lesiones premalignas (displasias) y malignas en pene. Además se han detectado gran cantidad de infecciones tales como Hemóphylus, Corynebacterium, Herpes Simples, Gonococos y otros.
El presente documento, pretende; entre otras cosas, dar una visión real de la problemática del contagio del virus del papiloma humano, así como hongos, bacterias y otros en la población masculina de nuestro país, sus métodos de detección, control y tratamientos disponibles, así como demostrar que es posible determinar la presencia de dicho virus en pacientes asintomáticos o que presentan una lesión evidente. además nos demuestra el padecimiento de de otras enfermedades causadas por bacterias, hongos, virus y otros, los cuales en el 95% de los casos, son asintomáticas en el varón y consideradas muchas veces como “normales”, pero causan síntomas en sus parejas sexuales.
La Citología de Raspado Uretral como método de detección del virus del Papiloma Humano y otras infecciones, así como de lesiones premalignas y malignas, fue introducida a nuestro país en el año 1994 por el Citólogo Antonio Villarreal Bonilla, Premio “Omar Dengo” al Bienestar Social y Premio Nacional “Aportes al Mejoramiento de la Calidad de Vida 2005” otorgado por la Defensoría de los Habitantes, el Gobierno de Finlandia y las Universidades Estatales, lamentablemente, no se ha determinado su introducción al Sistema de Salud de nuestro país, como un examen de rutina para el varón; no obstante, países como Honduras a iniciado al envío de pacientes a Costa Rica para que el laboratorio CITONOVA A y G les realice dicha prueba a varones de ese país bajo la supervisión de la doctora Tilcia López Quijada, especialista en Anatomía Patológica con pasantía en el Jackson Memorial Medical Center de Miami y además, la Sociedad Latinoamericana de Citología ha enviado una invitación para que dicho estudio y los alcances del mismo sean expuestos en el mes de diciembre en Querétaro (México), en el marco del XII Congreso Latinoamericano de Citología.
Por todo lo anteriormente expuesto se están llevando a cabo charlas educativas a empresas, colegios, universidades y comunidades que en forma organizada las solicitan. Sin que signifique ningún costo para dichas entidades y son ofrecidas por profesionales voluntarios en el ramo.
Unido a ésto, mostramos a través del presente documento el impacto social y de salud que el padecimiento de dicha patología ocasiona en nuestro país y la región, en donde no se ha observado esta problemática en el varón, como un problema de “Salud Pública”.